El estadio de Mestalla fue testigo de un partido vibrante entre Valencia y Real Sociedad que acabó en empate. Un gol del Valencia parecía inclinar la balanza a favor de los locales, pero la calidad y la insistencia de la Real Sociedad, liderada por Take Kubo y Ander Barrenetxea, logró igualar el marcador. Pese a los intentos de ambos equipos por desequilibrar el partido, la defensa visitante mostró ciertas debilidades y los cambios completados en la segunda mitad no lograron modificar el resultado final.

El Valencia comenzó el partido con fuerza , presionando alto y buscando generar ocasiones rápidamente. Esta presión temprana tuvo recompensa: un gol que adelantó a los locales y forzó a la Real Sociedad a replantear su estrategia. La defensa, con Álex Remiro y Duje Caleta-Car, mostró alguna fragilidad frente a la agilidad y precisión del ataque valenciano, al paso que Zubeldia y Beñat Turrientes trataron de contener el centro del campo y recobrar la posesión.

La Real Sociedad tardó en entrar en ritmo, pero cuando lo logró , mostró su mejor versión. Take Kubo se convirtió en el faro ofensivo, hilando pases y generando espacios, mientras que Ander Barrenetxea aportaba movilidad y hondura por la banda derecha. Pablo Marín y Mikel Oyarzabal procuraban dar continuidad al juego, pero los locales proseguían dominando ciertas fases del partido merced a su intensidad y efectividad en los balones divididos.

Tras el descanso , la Real Sociedad ajustó sus líneas y empezó a apretar con mucho más insistencia. Take Kubo abrió el marcador visitante con un golazo que devolvía la igualdad al marcador, lo que dejó al equipo soñar con la victoria. Barrenetxea y Oyarzabal se combinaron en varias acciones peligrosas, pero la falta de precisión en los últimos metros impidió adelantarse.